El paso de Rajoy por Berlín tampoco nos sacó de dudas

                                                              Antonio Casado

AL GRANO

EL CONFINDENCIAL.COM

Tampoco la comparecencia del presidente del Gobierno en Berlín junto a Angela Merkel nos sacó de dudas, a la espera de que alguien descifre el arcano verbal de Mariano Rajoy. Dice que “todo es falso, salvo alguna cosa”. Entonces no es todo, sino una parte. O sea, parcialmente falso. Ergo, parcialmente verdadero, como han confirmado Jaime Ignacio del Burgo, Pío García Escudero, Santiago Abascal (padre), Jorge Trías, Rosa Romero y otros.

Nadie ha desmentido de forma tajante la sospecha ya judicializada de que se cobraban comisiones ilegales a empresas que recibían carga de trabajo en las Administraciones gobernadas por el partido de Rajoy y Cospedal. Y, hasta ahora, nadie ha podido rebatir de forma convincente que existieran sobresueldos distribuidos por el entonces tesorero, fuese en negro o fuese en blanco. Todo eso sigue en el aire mientras la nube de la sospecha y la gran burbuja del desencanto no paran de crecer. Seguimos sin saber cómo alguien puede hacerse supermillonario ejerciendo de tesorero de un partido político, cuál es la verdad parcial o la mentira parcial de las famosas listas, cómo Bárcenas y Correa llegaron a ser dos caras de la misma moneda (Gürtel), de dónde salía el dinero para improvisar un préstamo y cómo es posible que el BOE (Boletín Oficial del Estado) le haya puesto tan fácil las cosas a los grandes defraudadores, como el mentado Luis Bárcenas.

Seguimos sin saber cómo alguien puede hacerse millonario ejerciendo de tesorero de un partido, cuál es la verdad parcial de las famosas listas o de dónde salía el dinero para improvisar un préstamoTodas esas incógnitas, y algunas más que están en la mente de todos, tienen suficiente calibre como para no quedar desactivadas por las medidas concretas adoptadas por la dirección del PP, teóricamente destinadas a cumplir las promesas de transparencia.

Juzguen ustedes mismos: publicación de las declaraciones fiscales de Rajoy en la página digital de la Moncloa; anuncio no confirmado de querellas contra Bárcenas, El País y el exdiputado Jorge Trías; los militantes, empleados o colaboradores del PP que quieran hacerlo van a declarar bajo juramento que han sido virtuosos cuando han manejado dinero del partido; y, finalmente, ya contamos con el resultado de la investigación interna dirigida por la actual tesorera, Carmen Navarro, que ha llegado en un pis pas a la conclusión de que “de las conversaciones mantenidas y la documentación que ha podido consultarse (…) no puede deducirse la existencia de ingresos o gastos realizados por el Partido Popular durante el periodo examinado que no hayan sido debidamente asentados en sus asientos y registros contables”. También podemos remitirnos al canutazo de Bárcenas que ayer habló de “burdo montaje”, aunque me parece que en estos momentos la contagiosa falta de credibilidad del extesorero del PP está por los suelos. Pero, en fin, allá cada cual.