Ricardo Alonso
Un entusiasta de la
creación, origen y evolución de la Universidad Nacional de Salta, el periodista
y exlegislador Luis A. Borelli, nos pidió a egresados de distintas carreras que
contemos a El Tribuno, apelando a la memoria, y al correr de la pluma, lo que
recordamos de nuestro paso por la noble institución que en este mayo de 2012
cumple cuarenta años de vida. Digo con certeza que una de las carreras que ha
trascendido las fronteras nacionales es la de Geología. Y esto tiene que ver
con varios aspectos, entre ellos sus tempranas raíces. Recordemos brevemente
que, en 1950, el profesor Amadeo Rodolfo Sirolli creó la Escuela Superior de
Ciencias Naturales con un reducido grupo de profesores ad honorem, entre ellos
el Ing. Rovalleti, Pompilio Guzmán, Humberto Sirimarco, Juan José Ortiz, el
padre Colalunga y otros entusiastas docentes. En 1952, Sirolli logró que se
convierta en Facultad de Ciencias Naturales dependiente de la Universidad de
Tucumán. Entre los primeros profesores se contaron a Jorge Daud, Francisco
Sepúlveda, Bernardo Schain, Telmo Moya, Humberto Sirimarco, Juan Russo y
Leónidas Cabrera, junto a personal de apoyo como Carlos Aibar, Elsa Arroyo,
Eduardo Moya, Alberto López, Eduardo Robino, Asencio Gerónimo y Martín
Chocobar. En 1954, la Universidad de Tucumán nombra delegado interventor a
Víctor Elías acompañado por el geólogo Carlos H. Moreno Espelta, como
secretario, y Eduardo M. Chambeau como responsable administrativo. En 1955, la
“Revolución Libertadora” echó a Sirolli y también a Francisco Artacho, Orlando
del Valle Cecilia y al geólogo Jaime Hernán Figueroa. Este último, en la década
de 1980, llegaría a ser vicegobernador de Salta junto a don Roberto Romero.
Hacia finales de la década de 1950 enseñaban en la proto-UNSa los geólogos
César Pagés, Jorge Daud, Carlos Moreno Espelta, Alejandro Nevestine, Juan M.
López Escribano, Francisco Briatura, acompañados por químicos, matemáticos,
físicos y topógrafos, entre ellos José Ruiz, Carlos Sastre, María Rodríguez de
Sastre, Alfredo Chiericotti, Carlos Cadena, José García, Miguel Riba, Humberto
Sirimarco, Juan Russo, Agustín Villarino, Matilde Gemesio de Zaffanella,
Alfredo Rodríguez, Rodolfo Parodi Bustos, Ramón De la Vega, Manuel Sánchez y
Raúl Berlingieri. Por supuesto que esta lista no agota la enorme cantidad de
nombres que formaron parte de los inicios de los estudios de ciencias naturales
en Salta y que por suerte han sido rescatados en dos gruesos volúmenes
históricos que escribiera María S. Rodríguez de Sastre. En 1972 se crea la
Universidad Nacional de Salta y la carrera de Geología se nutre de algunos
viejos profesores y también de otros provenientes de diferentes ciudades
argentinas que van a insuflarle aires nuevos. Quién esto escribe ingresó en
1973 en la primera camada de estudiantes de la flamante universidad. Entre los
viejos profesores se encontraban los cuatro que constituían el basamento de la
carrera y que eran los doctores Carlos Moreno Espelta en Introducción a la
Geología, Marcelo Figueroa Caprini en Geología Estructural, Antonio P.
Igarzábal en Geomorfología y Domingo Jakúlica en Petróleo y Combustibles
Fósiles.
Todos ellos han fallecido, y los recordamos porque fueron
grandes maestros que dejaron una huella imborrable en quienes fuimos sus
alumnos. Entre los que llegaron de otras universidades y dieron un fuerte
impulso a las ciencias geológicas estaba el Dr. Juan Luis Benedetto, quién se
hizo cargo de la enseñanza de la paleontología junto a la Lic. Margarita Toro;
el Dr. José G. Viramonte que se hizo cargo de la enseñanza de la petrología
ígnea y metamórfica con el Lic. David Plaza; el Dr. Ricardo J. Sureda, quién
enseñó (desde 1973) y enseña todavía, mineralogía, cristalografía y óptica, con
el Lic. José Solís en los trabajos prácticos, y la valiosa colaboración, en el
laboratorio, de los técnicos Ricardo Domínguez, Julio Chocobar y Luis Cardona;
el Dr. Arturo Castaños que enseñaba sedimentología con la Lic. Norma Orce en
los trabajos prácticos; el Lic. Víctor Marcón que enseñaba carteo geológico;
también se sumaron los geólogos Ricardo Omarini y Miguel Galliski, quienes se
hicieron cargo de la parte práctica de las materias de petrología y mineralogía
respectivamente y que además realizaron en Salta sus tesis doctorales. El
plantel docente se completaba con el Dr. José Salfity en la enseñanza de la
estratigrafía y la geología histórica, quién tuvo que hacerse cargo de la
cátedra ante el fallecimiento del eximio geólogo boliviano Dr. Celso Reyes, con
la colaboración del Lic. Willy Gutiérrez Solís en los trabajos prácticos; los
licenciados Armando Rubén Nadir, Teodoro Chafatinos y Gladys Herrera en la
cátedra de suelos, los profesores Oscar Ballivián, Antonio Arias, Mario
Raskovsky, Jorge Daroca, Carlos Morello y Rafael Argañaraz sucedieron al Ing.
Berlingeri en el dictado de Yacimientos Minerales; el Lic. Alfredo Fuertes en
Hidrogeología; los profesores Ing. Manuel Sánchez y Dr. Juan Carlos Apaza en
Geotecnia, el Lic. Miguel Chain Betancourt en las prácticas de Geomorfología,
el Lic. Carlos Barcat en las prácticas de Petróleo, el Lic. Carlos D.
Taballione en las prácticas de Geología Estructural, entre muchos otros. El
golpe de Estado en marzo de 1976 produjo un verdadero desastre, ya que muchos
profesores fueron obligados a renunciar e incluso a exiliarse en otros países.
Arturo Castaños y Margarita Toro se fueron a Bolivia; Juan Benedetto y su
esposa, la bióloga Teresa Sánchez, recientemente fallecida, se fueron a
Venezuela; Oscar Ballivián y Antonio Arias se fueron a Francia, y otros
perdieron su trabajo.
Para que los alumnos no perdiéramos nuestras carreras se
contrataron profesores de otras universidades y así tuvimos en Salta a grandes
maestros como los doctores Mario Teruggi y Bruno Baldis.
Las cátedras fueron rearmándose lentamente durante la década
de 1980 con los propios egresados de la universidad y así se hicieron cargo de
Paleontología la Lic. Susana Malanca; de Sedimentología, el Dr. Miguel Boso
(actual vicerrector de la UNSa); de Carteo Geológico, el Lic. Marcelo Brandán;
de Fotogeología, los doctores Víctor Omar Viera y Rodolfo Amengual; de
Geotecnia, Ernesto Valle; en las prácticas de Geología Argentina, el Dr. Sergio
Gorustovich; en las prácticas de Introducción a la Geología, el Lic. Angel
Chávez Manrique; el Geól. Luis Alvarez sucedió al Dr. Jakúlica en Petróleo y
Combustibles Fósiles, entre otros. A ellos deben sumarse otros profesores que
fueron ocupando las cátedras ante el fallecimiento, la jubilación de sus
titulares o simplemente por el sistema de concursos públicos y abiertos. Así
como también los profesores que enseñaron química, física y matemáticas, entre
ellos Roque Riggio, María Isabel Ibañez, Norma Zorrilla de Salas, Rina Egez, Lic. Héctor Funes,
Oscar Andrada, Rosa de Plaza, entre otros. La universidad cuenta hoy con un
plantel de geólogos de excelencia, entre los que se destacan, además de los ya
nombrados; Sureda, Salfity, Viramonte, Omarini, Boso, Valle, Brandán, Alvarez,
Gorustovich y Amengual, la Dra. María Cristina Moya, Dr. Julio Monteros, Dra.
Rosa Marquillas, Dr. Alfredo Castillo (actual vicedecano), Dr. Raúl Seggiaro,
Dra. Teresita Ruiz, Dra. Cristina Sánchez, Dra. Vanina López, Lic. Felipe
Rivelli, Geól. Alicia Quiroga, Geól. Cristina Paredes, Lic. Néstor Vitulli (hoy
director de la carrera de Geología), Lic. Juan Carlos Fernández, Lic. José
Sastre, Geól. Roger Soler, Dr. Raúl Becchio, Geól. Eduardo Gallardo, Geól.
Néstor Aguilera, Dr. Guillermo Baudino, Dr. Rodolfo García, Dr. José Arnosio,
Dr. Fernando Hongn, Dra. Roxana Alarcón, Dra. Alicia Kischbaum, Lic. Ciro
Camacho, Lic. Josefina Aris, Geól. Jorge Marcuzzi, Geól. Verónica Rocha, Lic.
José Medina, Geól. María Visich, Geól. Celia Barrientos, Géol. Alba Ramírez,
Geól. Mauro de la Hoz, Dra. Silvina Guzmán, Dr. Alfonso Sola, Geól. Pablo
Gómez, Geól. Andrea Barrientos, y el suscripto, entre muchos otros docentes y
auxiliares.
Seguramente este breve repaso histórico, desde 1950 a la
actualidad, dejó involuntariamente olvidados muchos nombres. Finalmente diremos
que el hallazgo o la identificación de las riquezas minerales metalíferas, no
metalíferas y nucleares, petróleo, gas, aguas subterráneas, suelos agrícolas,
fundaciones de obras civiles, hallazgos paleontológicos, identificación de
riesgos naturales, etcétera, han estado directa o indirectamente vinculados con
geólogos egresados de la UNSa.